La planta piloto del proyecto LIFE Superbiodiesel, una vez separada la fracción grasa para la obtención del biodiesel, aplica un proceso enzimático para la obtención de bioestimulantes o fertilizantes orgánicos a partir de la fracción proteica obtenida como subproducto del proceso anterior.
El uso de estos bioestimulantes simplifica el ciclo del nitrógeno de las plantas, al eliminar las etapas de nitrificación. De esta forma, las plantas se nutren directamente de los aminoácidos para formar proteínas, con lo que evitan tener que sintetizarlas y, reservan esta energía, para llevar a cabo diversos procesos metabólicos que suponen un aumento en su producción.
No obstante, ¿son comparables los bioestimulantes obtenidos en el proyecto Life Superbiodiesel con los fertilizantes comerciales?
La validación realizada ha permitido comprobar que éstos fertilizantes se ajustan a los estándares aplicables sobre mejoradores del suelo, al determinar sus buenas prestaciones a la hora de potenciar el crecimiento de las plantas, además de mostrarlos como bioestimulantes idóneos, dotándoles de un gran potencial para su comercialización.
La validación del crecimiento por germinación de diferentes variedades de plantas, además, reveló que, por ejemplo, en el caso de la col china, esta ve incrementado su índice de crecimiento en valores entre un 35 y un 40%, combinados con bajas dosis de los bioestimulantes, mejorando la estimulación con respecto a otros fertilizantes comerciales de naturaleza semejante.
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